sábado, 5 de julio de 2008

LUIS CORVALAN Y LA DEMOCRACIA

LUIS CORVALAN Y LA DEMOCRACIA



CORVALÁN, UN AUTÉNTICO DEMÓCRATA

A sus casi 92 años, el ex senador Luis Corvalán, da una nueva demostración de su capacidad como escritor e historiador, al presentarnos este miércoles 9 de julio a las 19 hrs. en Alameda 1346, Salón de Honor "Manuel Bustos" de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, su último libro, publicado por LOM Ediciones :

"Los Comunistas y La Democracia"

Hace más de un año que, como dicen sus regalonas nietas, el Tata Lucho viene trabajando en su computadora en este libro, que ha escrito y reescrito, leído y releído, en su sencilla cabaña de troncos de eucaliptus.

Y la gracia es que en esta tarea, don Luis tiene muy pocos ayudantes o ayudantas, el mismo escribe y luego le pide a su secretaria Lily que haga uno u otro arreglo.
También explota en la tarea correctora a la fotógrafa y chofera Hilda López.
Otras veces a su estudiosa nieta Julieta.
Y siempre junto a su Lides Gladys, su mujer de toda la vida, firme en su puesto.



Don Luis madruga casi todos los días. Despierta muy temprano y como fiel auditor pone la Radio Nuevo Mundo y se entera de lo que pasa en el país. También lee el diario, piensa, reflexiona. Toma su bastón y se va a dar una vuelta por su barrio y mira el resto de los titulares de la prensa, en el kiosco más cercano de su casa.

Su hogar siempre está abierto para sus compañeros, amigos, jóvenes y periodistas que deseen saber algo de la historia de este país.



Recibe correos electrónicos de todas partes del mundo, que lo mantienen informado de las copuchas, las noticias, las muertes, embarazos y nacimientos de seres queridos.

Cuando sale a la calle y un micrero o un automovilista que lo reconoce, le tocan la bocina y le hacen gestos amistosos con la mano o a veces con el típico "Y VA A CAER" . Entonces él levanta su mano izquierda y agradece esa demostración de simpatía y afecto.

Nunca se pierde las reuniones de la dirección de su partido. Hasta hace poco tomaba un bus y se iba solito a la sede de Vicuña Mackenna, y si nadie lo traía de regreso a su hogar, sencillo, volvía en micro. Y cuando alguien lo reconocía, lo saluda modesto, le da la mano y conversa unas palabras.

Tampoco falla a las invitaciones que le hacen las células del partido de Santiago o los amigos socialistas. Eso sí que pide que lo vayan a buscar y a dejar. Ya no viaja a regiones ni al extranjero, porque se agota mucho.

Este libro pidió que lo presentará el presidente del PC, Guillermo Tellier y el ex ministro y ex presidente del PS, Jorge Arrate.
Participa en este lanzamiento su amigo Max Berrú y su grupo musical. Y hasta habrá para los que asistan un vino de honor ofrecido por LOM, no el tradicional pipeño del Itata de su infancia, que don Luis toma diariamente y que lo mantiene longevo, lúcido y opinante.



Corvalán es un ejemplo de político de nuevo tipo, tiene una modestia propia del tomecino criado "a lo huaso" por su madre doña Adela. Nunca se lo ha visto con cara de estrella, ni se cree el cuento de personaje, aunque sí lo es, e incluso hasta sus nietas menores, Catalina, Irina y Julieta, les costó entender que su abuelo era un gran personaje de la historia de Chile.

Cata, la menor, de solo 4 años, toma onces todos los días con sus abuelos y se deja regalonar con ricos tecitos y sanguruchitos que le hace su abuelita.
Y a veces se va con el tata, que amorosamente la lleva a su Jardín infantil.

Irina, que nunca se había metido en nada, hace poco le dio una gran alegría a don Lucho, participando en la marcha contra la Ley General de Enseñanza y volviendo a casa mojada por el guanaco y rociada con gases lacrimógenos, tal como a veces le pasaba a sus hijos Alberto (Coné), Pili (la matea) o Viviana (la artista).

María Victoria, su hija menor lo acompaña permanentemente y está a su lado siempre lista para atenderlo a él y a doña Lily, que se apresta a sus 82.

Así don Lucho ha estado meditando sobre la Democracia-Democracia, y tiene algunas cosas que decir, en este país de democracias a medias y donde muchos usan una retórica democratoide, pero que han hecho poco para abrir las grandes alamedas a los hombres libres de Chile y que mantienen amarrada y binominalizada a esta señora.

Como político del pueblo, auténticamente vinculado a los trabajadores, irá a la casa de la CUT, que lo recibe nuevamente, para escuchar su palabra de compañero.



Estar en la CUT es una demostración de que Corvalán es un verdadero demócrata, ya que son pocos los políticos de este país, que podrían llegar a esa sede, o que tendrían moral democrática para ser bien recibidos en la casa de los trabajadores.

Allende fue uno de esos hombres, y qué lejanos de él están en los hechos, muchos de los actuales políticos del país. Sobran dedos de la mano del pueblo -ahora llamado gente-, para mencionaa a los verdaderos demócratas.



Por eso, don Luis se ha ganado el respeto de todos los sectores, por toda una vida de consecuencia. El es un chileno, que puede caminar libremente por la calle, sin temores y hablar con cualquiera de democracia, de esa que sueñan los trabajadores.

El Tata se da tiempo para todo, para comer lentejas con su nieta periodista Andrea, o para celebrar a su nieta abogada Ximena, para chochear con su bisnieto Emiliano, que le dio su nieta Adelita y ahora se prepara a recibir el que viene en camino y que le encargaron su nieto músico Diego y Mariel, su esposa mexicana.

Cuento aparte es la historia con sus criticantes yernos Rodrigos, 2 que se las traen y que le exigen más democracia todavía, para contarlo TODO.

El Corazón de Corvalán sigue latiendo, como dice su única nuera, Ruth Vuskovic y ahora para hablar de DEMOCRACIA. Pero la tarea del Tata Lucho no termina aquí y ya junta materiales en su PC para su próximo libro.

Para contar sabrosos chascarros en la política. Y ojalá los contara todos, para abrir las mentes de la acartonada y auto denominada clase política de este país y para terminar con las exclusiones que prueban que Chile sigue siendo un país dominado por la democracia protegida, impuesta desde 1973 por quienes todos saben y mantenida tal cual hasta ahora, por los otros que todos conocen.